martes, 5 de enero de 2010

Obsequio




Se Regala un cuerpo sin alma, solo y desgraciado está.

Se Regala un cuerpo que pide otro cuerpo siendo uno más.

Se Regala un cuerpo inútil que no sabe más que llorar y caminar sin avanzar.

Se Regala, algo que no sirve más allá, porque aunque cuerpo no tuviéramos, y solo alma fuéramos, seriamos más, que un cuerpo inútil que vaga sin cesar.



La Duda




Iluminará entonces el camino de mi vida como el amor fugaz de ese corazón tuyo. Soplará entonces el viento adentro del cielo, jugando a ser niños ingenuos insertos en éste tiempo. Confundiremos entonces mil palabras entre los labios, charlando, creyendo conocernos…